El régimen arremete contra la solidaridad internacional

Gerardo Hernández Nordelo, actual coordinador de los Comités de Defensa de la Revolución (CDR) y exespía del grupo conocido como “Los Cinco”, volvió a protagonizar una escena de cinismo político al atacar al reconocido artista español Alejandro Sanz. ¿La razón? El cantautor mostró su apoyo a los estudiantes cubanos que han salido a protestar contra el nuevo tarifazo de ETECSA.

Desde su cuenta oficial de Facebook, el exagente castrista escribió: “¡HIPÓCRITAS! Aún se respiran gases lacrimógenos en Los Ángeles. Latinos de varios países son ‘cazados’, familias separadas… Pero Alejandro Sanz y los congresistas ‘cubanoamericanos’ callan miserablemente. Están muy ocupados con los Megas de estudiantes en Cuba”.

La frase refleja no solo el tono altanero y despectivo que ha caracterizado a los voceros del régimen, sino también su costumbre de desviar la atención hacia problemas ajenos, sin asumir la responsabilidad sobre las crisis generadas por su propio sistema.

Alejandro Sanz defiende la voz de los jóvenes

Lejos de cualquier discurso hipócrita, el mensaje de Alejandro Sanz fue claro y emotivo. En su cuenta de X (antes Twitter), escribió: “En la voz de los jóvenes cubanos late el futuro de un país que aún sueña despierto”. Un gesto simple, pero profundamente humano, que se aleja del silencio cómplice que muchas celebridades internacionales aún mantienen frente a las injusticias en la Isla.

El respaldo de figuras públicas como Sanz no solo dignifica la lucha de los estudiantes cubanos, sino que desmonta la narrativa del régimen, que insiste en pintar a los manifestantes como manipulados o instrumentos del “enemigo exterior”.

La doble moral de Gerardo Hernández

La arremetida de Gerardo no es casual. En días recientes, en lugar de hablar sobre la creciente indignación juvenil en Cuba, el exespía prefirió criticar la represión a manifestantes propalestinos en universidades de Estados Unidos. Un intento burdo de desviar la atención de lo que ocurre dentro de sus propias fronteras.

Hernández, además, ha ironizado sobre apagones en Europa, buscando minimizar las condiciones infrahumanas que enfrentan los cubanos en su día a día. Bajo su lógica, los problemas del mundo siempre son peores que los de Cuba, y todo es culpa del “bloqueo” o de campañas mediáticas externas.

La juventud no se calla

Desde que ETECSA anunció su nuevo esquema tarifario en moneda extranjera, miles de estudiantes han expresado su rechazo por redes sociales y en espacios universitarios. Denuncian que el tarifazo excluye a los más vulnerables, limita el acceso a la educación, y convierte un derecho como la comunicación en un privilegio reservado para quienes reciben remesas.

En vez de escuchar estas demandas, el régimen ha optado por desacreditarlas y enviar a sus voceros, como Gerardo Hernández, a atacar desde el fanatismo ideológico. Pero el mensaje de los estudiantes es cada vez más claro: no luchan solo por “megas”, luchan por dignidad.

Voces que amplifican la esperanza

Mientras el oficialismo intenta silenciar y dividir, la solidaridad internacional se multiplica. Gestos como el de Alejandro Sanz reafirman que la juventud cubana no está sola. Y aunque los burócratas del régimen pretendan reprimirla o ridiculizarla, cada día más voces se suman a su reclamo de libertad, justicia y acceso a derechos básicos.