Díaz-Canel condena ataque de Israel a Irán y defiende a uno de sus principales aliados

Miguel Díaz-Canel condenó el reciente ataque aéreo de Israel contra Irán, alineándose abiertamente con su aliado teocrático y señalando supuestos peligros para la paz mundial, sin mencionar la amenaza que representa el programa nuclear iraní. El pronunciamiento, emitido desde su cuenta en la red social X, forma parte de la retórica oficial del régimen cubano, que históricamente ha respaldado a gobiernos autoritarios en su confrontación con Occidente.

Según Díaz-Canel, el bombardeo israelí, que tuvo lugar en la madrugada, “eleva la tensión en Oriente Medio de manera irresponsable” y “pone en peligro la paz y la seguridad internacional”. Aunque habló de respeto al Derecho Internacional, el gobernante cubano omitió condenar las acciones represivas y desestabilizadoras del régimen iraní, cuyo historial de violaciones a los derechos humanos y amenazas regionales es ampliamente documentado.

Alianza entre dictaduras: Cuba e Irán

La reacción del mandatario no sorprende si se tiene en cuenta la estrecha relación entre La Habana y Teherán. En diciembre de 2023, Díaz-Canel fue recibido en Teherán por el líder supremo Alí Jamenei, y firmó acuerdos en sectores como energía, salud y tecnología. Ambos regímenes, además de compartir intereses económicos, mantienen una alianza ideológica que rechaza el orden democrático liberal y respalda la represión interna como mecanismo de control.

Cuba e Irán han coincidido en foros internacionales para atacar las sanciones impuestas por gobiernos democráticos, al tiempo que censuran, criminalizan y persiguen a sus opositores. Esta solidaridad autoritaria es un reflejo de su modelo común: control de la información, represión de la disidencia y culto al poder.

Estados Unidos aclara su postura ante el conflicto

Frente al ataque israelí, el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, negó toda participación de su país y reafirmó que Washington no estuvo implicado en la operación. En su declaración, subrayó que Israel actuó de manera unilateral, y que la prioridad de Estados Unidos es proteger a su personal desplegado en la región.

Rubio también fue enfático en advertir a Irán sobre cualquier intento de represalia contra intereses estadounidenses, dejando claro que, aunque no formó parte de la ofensiva, su gobierno no tolerará ataques que comprometan la seguridad regional.

Impacto geopolítico y económico del ataque

El ataque israelí, que causó la muerte del comandante de la Guardia Revolucionaria iraní Hossein Salamí y de al menos seis científicos nucleares, ha elevado la tensión en Oriente Medio. La planta nuclear de Natanz resultó dañada, aunque el OIEA confirmó que no hay riesgo de radiación.

Como era de esperarse, el ataque desató reacciones de condena por parte de aliados del régimen iraní, como Rusia, China, Venezuela y Arabia Saudí. El precio del petróleo se disparó hasta un 13 %, reflejo del temor a una escalada que pueda afectar el suministro energético global.

La respuesta de Irán no se hizo esperar: Jamenei amenazó con castigar severamente a Israel, mientras Netanyahu celebró la operación como un “éxito”. En paralelo, Estados Unidos convocó una reunión urgente del Consejo de Seguridad Nacional.

El silencio de Díaz-Canel sobre las víctimas iraníes que integraban una estructura militar con historial represivo, y su respaldo implícito al régimen teocrático, reafirman el papel del castrismo como cómplice de las peores dictaduras del mundo.